DIPLOMACIA

Prisioneros en Tergainpor Guillermo Belziti

Los mineros ya habían sido reducidos y yacían de rodillas con las cabezas rendidas a los pies de sus verdugos. Solo ZYAR tuvo las agallas suficientes para levantar la vista. Cuando lo hizo clavo su mirada de hielo en tus ojos.
-¿Armas? ¿Alguno ha visto un arma por aquí? -hablas con tanta seguridad que nadie podría contradecirte-. Nos crees tan tontos como para tener las armas encima. Puedes llevarnos como prisioneros o matarnos aquí mismo si así lo deseas.  Luego explícale a tu jefe donde hemos escondido las armas.
La cara del capitán te dice que has hecho un movimiento maestro. 
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